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EL SER HUMANO ES MORALMENTE RESPONSABLE ANTE LA
VERDAD.
Juan José Bocaranda E
Es falsa la
honradez moral de quienes presumen de
conocimientos culturales calificados, pero rehúyen o niegan la horadez
intelectual, que es el respeto escrupuloso por la verdad. No podemos amar
realmente la justicia si no amamos como base la verdad.
El ser humano es moralmente responsable ante la verdad. Ello es
inevitable. Sobre todo cuando se encuentra envuelto el destino del Mundo.
La responsabilidad sube de grado y se torna más exigente en proporción al
nivel del desarrollo intelectual del individuo. De ahí que, cuando alguien –sea
quien sea- plantea una propuesta de
trascendencia, el sujeto esté en el deber moral de abocarse al conocimiento de
la misma para establecer si alberga algo de la verdad y en qué medida. Si
infiere que ella no es tal verdad, debe
combatir la propuesta. Pero si por el contrario, halla la verdad, nace para él
el deber moral de defenderla, de contribuir con sus medios para sustentarla y
de aportar los elementos a su alcance para fortalecerla o consolidarla. Si
permanece indiferente, se crea una deuda moral, pues la consciencia le dice que
en todo momento y circunstancia el hombre se debe a la verdad, sean cuales sean
las consecuencias.
La deuda moral se incrementa si, además, el sujeto actúa con mezquindad, impulsado
por bajos sentimientos como la envidia, el odio, el interés, la conveniencia o
la cobardía.
Esta actitud negativa, tratándose de un profesional directamente
relacionado con la materia propuesta, genera el estado mental de la ignorancia,
de la ignorancia privativa, de la ignorancia culpable, que atañe a quien
debiendo conocer la verdad por obra de la profesión o de otras circunstancia,
la deja de lado, marginándola con el silencio de la mezquindad y de la bajeza
moral.