LA CLAVE IUS-ÈTICA DE HOY.
EL ESTADO MINUSVÀLIDO Y LA CRISIS DEL
DERECHO
Juan Josè Bocaranda E
Es algo que nadie puede negar: cuando
vemos los noticieros en la televisión, nos convencemos, en forma creciente, de que
un alto porcentaje de ser del Derecho legislado no se cumple o, si se cumple,
lo hace en forma deficiente. Y no solamente en nuestro país, sino en el mundo entero y en los màs
diversos aspectos de la realidad humana y social.
Ello nos indica:
1º. Que no basta sancionar y promulgar
leyes, sino que es preciso realizarlas con plenitud de consciencia, para lo
cual se requiere el aporte de la propia
sociedad que vigila, controla y exige, y el aporte de los funcionarios, que muy
pocas veces obran con la conciencia moral de su función.
2º.Que la “causa de las causas” radica en
que no se tiene presente la necesidad histórica de conjugar estrechamente el
Derecho con la Moral como compromiso profundo, y no con la simple “Ètica”
invocado, si acaso, como simple pretexto ornamental.
3º.Que siendo en realidad todos los
derechos, Derechos Humanos, pues estàn hechos para el hombre (y “no el hombre
para el Derecho”), todos sus mecanismos deben regirse por el principio de la
dignidad humana, que no suele tomarse en cuenta sino en la cátedra y en las
festividades de los Derechos Humanos.
4º.Que dìa tras dìa las crisis que azotan
a la Humanidad son màs agudas y complejas, por lo que se requiere agudizar también
la calidad y las formas de las soluciones.
5º.Que los problemas que antes se resolvían, quizás, con el Derecho,
hoy se resisten a soluciones puramente jurídicas. Porque la causa es cada vez
más profunda.
6º.Que un Estado moralmente minusválido como el que opera hoy como
simple “Estado de Derecho”, no puede estar en condiciones reales de resolver
los problemas, porque carece de autoridad moral.
7º.Que la Humanidad està viviendo y padeciendo un círculo vicioso: un
Derecho ineficaz producto de un Estado ineficiente, y un Estado ineficiente que
no puede ser rescatado por un Derecho ineficaz. De lo cual se desprende que la
crisis es doble y a la vez unitaria: la crisis del Estado y la crisis del
Derecho, esencialmente vinculadas.
En CONCLUSIÒN, se requiere un factor capaz de cortar de un solo tajo el "nudo
gordiano" de ese círculo vicioso, y el "mandoble" es la Moral, como lo propone la IUS-ÈTICA.